domingo, 23 de diciembre de 2012

Una enorme avenida soleada

Escapar, salir de ese lugar, liberarse. Sabía que la fuga sería sólo momentánea, pero valía la pena intentarlo de todas maneras. Había llegado a esa conclusión a la segunda semana, esa hipócrita realidad no debía durar mas..
Las pastillas te nublaban la vista y te hacían casi inservible, pero a fuerza de disciplina había descubierto el segundo piso. Ahí podía llevar la radio y escuchar mis programas favoritos casi como si ya estuviera fuera, eso me reanimaba, ya se podía planificar parte del futuro.
Los días pasaban, la rutina comenzaba a molestar, pero el segundo piso seguía siendo una luz de esperanza. Una tarde lo comprendí, debía tomar una decisión rápida. Cuando crucé el techo de tejas rojas rumbo a la zona de la puerta levadiza del garaje, casi ya estaba en la calle, pero alguien me cogió de un pie y caí aparatosamente al piso, tal vez un golpe fuerte, pero nada importante, sin embargo el dolor en la espalda me supo a una gran molestia. No, no pude escapar, aunque en mi sueño ya caminaba por las calles soleadas libremente, vaya ilusión. Ésa era mi ilusión y no otra.
 Con el intento de escape, todo empeoró, atado a una cama y adolorido, sólo podía llenarme de paciencia, después de todo, ahora debía esperar mas tiempo.
El tiempo, ¿qué es el tiempo ? , entre lo biológico y lo lumínico el tiempo se me hizo inasible pero si abarcable por segmentos digamos largos, de modo macro, vi madurar las cosas, las realidades, las ideas..
La vereda iluminada de una enorme avenida con gente en dirección contraria, esa imagen me persiguió por un buen tiempo, el sol cayéndome directamente en la cara, y mis ojos enceguecidos guardando la alegría de ser un hombre libre, libre al fin...


miércoles, 31 de octubre de 2012

Sol

Despierto con el sol en la cara. Un enorme sol sobre la playa de Huanchaco y sólo el rumor de las olas. El rumor de las olas y el horizonte del mar, vaya espacio amplio de tranquilidad. A esta hora el sol nos abraza, se mete por la boca del estómago y nos despierta con aparente calma. ¿ Qué pasó anoche ?.. Ah, sí, era el primer día de la bienal, fui a ver la danza contemporánea en lugar de la exposición de una de las casonas de Trujillo.
Alguna amiga se molestó conmigo no se porqué y terminé tomando unas cervezas con los amigos. Tengo el programa en el bolsillo , las actividades comienzan desde temprano.Trato de dormitar un rato más, los bañistas ni se han percatado que estoy desde ayer o eso es lo que yo creo...
Un amigo pintor viene a pasarme la voz :
- hey Aldo ! hay una performance a las 11 con baldes de pintura, vamos ya se hace tarde!

Hay días que son así, que ya vienen con el sol puesto en el cielo desde temprano como hoy, y que el reloj biológico se tarda en sintonizar, todos andan como en una realidad paralela, mas apurados, mas agresivos que de costumbre, no queda si no, poner piloto automático, tratar de aparentar estar al mismo ritmo. Si, que delicia, me quedé dormido y el arrullo de las olas me despertó.

Después de todo, es un bonito día con sol esplendoroso, ya postergué todos los asuntos pendientes y se vienen días feriados, como dice una canción de Spinetta : " tengo mucho tiempo por hoy, los relojes harán que cante "..Ciertamente prefiero los lugares frescos y con aire de "aca  no pasa nada", un poco de paz y la confianza de alguna buena amiga. Los días pasan así cuando las obligaciones amainan y se asume que la vida también puede ser un largo oasis de belleza contemplada con un traguito y buena compañía.

  

jueves, 27 de septiembre de 2012

Que el barro no se levante contra el cielo color agua de arroz

Cuando el cuerpo se me partía en dos, habían noches así. Un color del cielo pegado al piso y otro pegado al techo, como el agua y el aceite, un gris sepia y un negro de sombra tostado que no dialogan, que el horizonte diga lo que pasa, que hable el cielo...
Así en medio de la garúa regresando en un transporte público, casi intuyendo que las cosas escondían una tragedia, pero sereno entre las soledades buscaba razones a tu ausencia.
Era en ti en quién pensaba pero también en el vacío, en el silencio de océano que se formaba cuando inutilmente pensaba que solo bastaba estirar el brazo para acariciarte. No, la vida era mas enigmática, apenas podía identificar el mensaje oculto viendo el cielo partido en los dos colores, eso lo decía todo.
Por eso, preguntarle humildemente a mis acuarelas que es lo que estaba pasando era lo mas seguro. Una vez más una música de fondo, el calor de estar con uno mismo y el precio de ser libre, me decía que el desierto estaba recién empezando como antes, como ahora, como siempre. Y después mas adelante, arriba, muy arriba, la mañana húmeda, despejada como cuando los ojos están muy cargados de dormir, y solo se ve pura luz hasta que escampa. La mañana de agua de arroz, la mañana de verde tán palido que casi parece blanco, pero que al fin y al cabo es mañana. 

sábado, 9 de junio de 2012

contando los días de junio

Habían traído a uno nuevo. Lo sabíamos porque las enfermeras estaban especialmente excitadas ese día. Era un día más en aquel lugar, el cielo gris de Lima apenas se intuía pero se sentía tras las vidrieras, tras los frascos de pastillas, tras las cucharitas de la mesa y el mal olor de la cocina. En la salita de espera los pacientes rezábamos en silencio e intentábamos distraernos jugando naipes o buscando algún programa de televisión que no nos diera miedo. El miedo y  la angustia siempre estaban presentes en ese lugar.

Desde la habitación del nuevo se escuchaban risas, era algo inusual pues la enfermera estaba dentro, quizá el nuevo no estuviera tan enfermo, se sentía que la estaban pasando muy bien. Nunca lo vimos al nuevo, sólo fue un affaire de la enfermera, o tal vez un refugiado. Pasaban cosas extrañas  en ese lugar, si. Como aquella noche del apagón hablando de Sendero Luminoso y del penoso primer gobierno de Alan entre pacientes y visitas por el cumpleaños de uno de los médicos. Junio, contando los días en mi cuaderno, uno de estos días, quizá mañana salga de ambulatorio, quizá mañana, quién te dice y ya me toque salir, ojalá , Dios lo quiera y el mundo deje de ser, esa esfera angustiosa.

Vino el día, y claro que hubieron señales, a mi mejor compañera le dieron de alta, había una enfermera que estaba embarazada y olía algodones con alcohol durante todo el día, además, se escuchaba el martillar de los obreros en un edificio en construcción cercano, todo indicaba que saldría, la cosa era mantener la calma, después de todo, el infierno también podía sentirse acorralado, la luz blanca y mortecina de Lima, quería entrar por la puerta de salida, llegó el día, ya vienen por ti, ya puedes bañarte y cambiarte, ya vienen por tí, esta mañana sales, además hoy juega Perú en las eliminatorias, amigo , la vida continúa...

viernes, 20 de abril de 2012

todos los días empezamos de cero

“el artista es el incomprendido, el parásito, el excéntrico; vive en un grupo cerrado y aún el barrio que habita con sus congéneres, es un lugar equívoco; lo miran con desconfianza el burgués, el proletario y el profesor"-Octavio Paz


En la constancia de los días, en la antigua caminata nocturna y diurna, en la experiencia misma de los años transcurridos ya no hay lugar para la sorpresa. Si hay una promesa : un lugar donde el arte respire. Esto continúa desde antes, continuará después, es la eterna tarea, que el minotauro no muera aún cuando esté encerrado en el laberinto, que la esperanza no desmaye, estamos aquí para construir ese lugar, después de todo, sólo se trata de un lugar para el humano libre, creyente en un mundo mejor, discernible, fortalecido por su magia y su entereza. Emprender el camino es la construcción, recuerdo por ejemplo el hermoso proyecto instalacionista realizado hace unos años en alta mar por dos artistas europeos, instalaron una precaria vivienda en forma piramidal y la habitaron durante una lapso de tiempo, alrededor de un mes, él escultor ella fotógrafa, todo sobre el mar, se sentía entonces mas intensa la corrosión que provoca el agua y la humedad y la precariedad de ser un artista, aquel hombre libre que Cortázar vió en el minotauro de la leyenda griega. 

Lo otro, lo común lo vivimos a diario, en los periódicos del kiosko de la esquina, en el tráfago de la calle, en la velocidad de los automóviles por las grandes avenidas de la ciudad, en los bancos, en los enormes edificios de lunas espejos, en el sistema que no se detiene, que es anónimo , que tiene una lógica definida y conocida con su ideología vertical y finalmente banal, esa que está por todos lados y que nadie está dispuesto a cuestionar, para qué.  La sociedad, el poder del dinero, la maquinaria del sistema, silenciosa y dura. Ése es su retrato, si, muy bien, algo mas ?... el discurso sobre la imagen y sus manipulaciones, su sesgo y su crítica, lo que debe ser y lo que no. Ése es nuestro contexto, nada nuevo, el de siempre, hasta que resistamos o nos adaptemos, es sencillo.

Y de pronto tenemos al arte, que no se sabe de donde viene, al que nadie ha invitado a la mesa, pero reclama su espacio, su lugar, que habla y no se le entiende del todo, que habla y resulta ser otro idioma, un idioma mas elevado, un idioma mas íntimo y cuestionador. Al sistema le incomoda y entonces lo mira de reojo, a ese hay que controlarlo, a ese hay arrinconarlo, a ese hay que hacerle hielo, ese es peligroso para nosotros, entonces queda postergado. Y justamente ahí radica su fuerza, en las tardes olvidadas del cementerio, en la libertad del tiempo dedicada a su manifestación, el arte emerge profundo, intenso, fuerte, mágico, subyugante, cristalino, nuevo y nos habla. Es el espacio nuevo, es el espacio sagrado y eterno, es el lugar donde el arte respira.


lunes, 13 de febrero de 2012

nostalgias urbanas vs presentes mediáticos
























Ya desde hace varios meses y en medio del precipitado ritmo de vida vigente y vertiginoso de la actualidad, he venido reflexionando por momentos ( tan breves como me permite la vorágine cotidiana ) en torno a algunos fantasmas que han ido aflorando inadvertidamente, podría decir subrepticiamente en la mente y memoria de personas, ciudadanos de los sectores sociales que antes llamábamos clase media en Lima y que han ido tomado cuerpo real en la ciudad. Azuzados por el uso indiscriminado de la internet y las redes sociales nos hemos vuelto máquinas de opinar y escribir nuestras sensaciones e ideas, afectos y odios en mensajes, posts y estados de perfil.

Tal vez por eso no percibimos estos vuelcos en la realidad de presencias de nuestras mas antiguas nostalgias urbanas. Lo he notado por ejemplo en el caso del intento de restauración de la desaparecida playa La herradura que pareció un sueño setentero de la clase media y se chocó con la realidad de un devenir brusco e ingrato en su corporización actual. Leyendo el libro "Pasaje de Regreso" de mi compañera de estudios Rosanna Montoya (que actualmente reside en USA) también encuentro esta nostalgia corporizada en sus personajes, cuasi fantasmas en la ciudad en busca de algo que les devuelva su identidad perdida por el tiempo. Es el clima, entonces, de fondo, es el espacio en el que nos movemos que deviene en ajeno, en extraño para nosotros mismos, los cambios de la urbe se nos antojan agresivos, lapidarios, torpes, contraproducentes.


Lima y sus decantamientos urbanos, sus demoliciones y construcciones de nuevas pistas y edificios configuran un espacio urbano fragmentado, hostil, desarticulado que nos cuestiona y confronta. Siempre quedan muchas preguntas flotando en el aire para mis amigos que vienen del extranjero después de años : por qué demolieron tal mansión? , por qué se escucha chicha y reggaeton en las radios?, por qué la vía expresa de javier prado es tan estrecha?, por qué el metropolitano ha establecido nuevos muros en Lima? por qué una serie novelada como "al fondo hay sitio" tiene tanto éxito? ...

Este presente urgido de resultados, de apremios y de nuevos retos nos devuelve a una Lima bullente, interminable (uno demora 2 horas en salir de lima en bus), a la vez compleja y contrastada, provinciana, de jóvenes de vida intensa diurna y nocturna, de trabajadores stressados a tiempo completo . Hace pocos días caminaba por la avenida Alfonso Ugarte y también me preguntaba que pasó con Lima, el metropolitano la ha partido en mil pedacitos y se supone que por un bien común, facilitar el transporte de los ciudadanos, puede ser que si, pero será para integrarla mejor? Sólo queda por ahora este presente mediático.